Si «quiro» significa manos y «ki» significa energía vital, obtendremos la fusión de una técnica manual de masaje muscular y energético. Su finalidad es la de aliviar y mejorar los diferentes trastornos que el paciente presente en diferentes partes de su anatomía, con distintas manipulaciones y movimientos, ejerciendo diferentes intensidades de presión y siempre sirviéndonos de las manos.
Al realizar quiromasaje energético, no sólo vamos a tratar el cuerpo físico, también vamos a trabajar con nuestra mente y nuestras emociones, pues cuando sentimos dolor en el cuerpo físico es porque algo no funciona a otros niveles y aunque no sepamos reconocer que nos pasa, en esa manifestación de malestar a nivel físico hemos podido bloquear emociones, miedos, estrés, preocupaciones…
Con el Quiro’ki conseguimos soltar las tensiones a nivel profundo, recuperar una mayor vitalidad, aumentar el equilibrio del sistema nervioso y un mayor rendimiento del sistema inmunológico, consiguiendo así una mejora en el estado de la salud del cuerpo a nivel holístico.